Risotto de tomate

En una olla, poner a hervir medio litro de agua.

Cuando empiece a hervir, cambiar el fuego a baja potencia (simplemente para mantenerlo caliente).

Añadir una cucharadita de pasta de tomate, un puñado de sal y remover.

Mantener caliente la mezcla para poder cocinar el arroz.

En una olla, poner a fuego medio abundante aceite de oliva virgen extra.

Pelar y limpiar la media cebolla y cortarla en brunoise.

Añadir la cebolla a la olla y dorar alrededor de 5 min.

Echar sal y mezclar.

Una vez dorada, añadir los 200g de arroz especial para risotto y perlar.

Añadir los 200g de salsa de tomate natural, remover y añadir sal.

Durante 20m (lo que tarda el arroz en cocerse) ir añadiendo poco a poco, cazo por cazo, la mezcla de agua y tomate que mantienes caliente a fuego bajo. Mezclando bien después de cada cazo, y esperando a que el arroz absorba todo el líquido antes de añadir el siguiente.

Hacer esto durante 20 minutos sin dejar de remover y a fuego medio-bajo.

Pasado el tiempo, apagar el fuego y añadir los 40g de mantequilla y parmesano rallado.

Mezclar y esperar a que se derritan con el calor residual del propio risotto.

Una vez terminado, probar y corregir de sal y pimienta al gusto si es necesario.

Mientras el risotto se hace, poner en una sartén abundante aceite de oliva virgen extra.

Añadir unas ramas de tomillo y romero fresco junto con dos dientes de ajo un poco aplastados (así sueltan más aroma).

Añadir los cherrys en rama y dejar confitar a fuego medio-alto unos 10-15 minutos.

Reservar para decorar el risotto.

Servir el risotto en un plato y poner unos cuantos cherrys confitados encima.

Añadir una cucharada del aceite de los cherrys, ya que tiene todo el sabor infusionado de las hierbas, el ajo y los propios tomates.

Poner parmesano al gusto.