Pastel vasco de cerezas

(si no habéis encontrado harina de almendra, se puede hacer perfectamente en casa)

1. Para ello, necesitáis 100g de almendra cruda.
2. En una sartén a fuego medio tostar las almendras un poco.
3. Una vez tostadas, sacar las almendras a un plato/túper para que se enfríen.
4. Con un procesador de comida triturarlas 15seg hasta que quede una especie de polvo que recuerde a la harina.
5. Si no tenéis procesador de comida, podéis meter las almendras en una bolsa de congelar y aplastarlas con la ayuda de un rodillo.

1. En un bol, mezclar los ingredientes secos: la harina de trigo, la harina de almendras, el azúcar, la levadura y la sal.
2. Añadir la mantequilla fría en daditos e incorporarla con la ayuda de la yema de los dedos haciendo una especia de “pellizcos” hasta obtener una textura arenosa.
3. Añadir el huevo y la yema y con la ayuda de una espátula mezclar todo hasta que quede una masa homogénea (no mezclar de más, queremos que nos quede una masa suave y no muy trabajada).
4. Envolverla en papel film y meter a la nevera durante 1h.

1. Limpiar y deshuesar las cerezas.

1. En la cazuela donde lo vayáis a cocinar, añadir las cerezas junto con el zumo de medio limón y 50g del azúcar.
2. Dejar macerar a temperatura ambiente de 30m a 1h.

1. Echar el resto del azúcar a la cazuela con las cerezas y poner a fuego medio-alto.
2. Una vez haya cogido fuerza, bajar a fuego medio-bajo y cocinar dándole vueltas de vez en cuando durante 40-50m.
3. Al finalizar el tiempo, añadir el agua y remover.
4. Apartar del fuego y reservar.

1. Engrasar el molde con mantequilla.
2. Sacar la masa de la nevera y dividirla en dos parte iguales.
3. En una superficie con abundante harina estirar la masa con un rodillo hasta que quede más grande que el molde (el grosor es al gusto).
4. Enrollar la masa en el rodillo y colocarla en la base del molde.
5. Acomodar la masa en el molde, importante que los bordes del molde también queden bien cubiertos de masa.
6. Quitar el exceso de masa de los bordes del molde.
7. Pinchar la base de la masa con un tenedor (unas 4 veces).
8. Añadir el relleno a temperatura ambiente.
9. Estirar la otra mitad de la masa igual que la anterior.
10. Enrollar la masa en el rodillo y colocarla por encima.
11. Quitar el exceso de masa de los bordes del molde.
12. Es importante que quede del todo tapada y los bordes estén bien pegados para que el relleno no se salga.
13. No tiréis la masa sobrante, podéis aprovecharla para hacer unas galletas.

1. Pintar la superficie del pastel con la yema de huevo.
2. Con un tenedor hacer unas líneas transversales por la superficie (no apretar mucho).

1. Hornear durante 40m.
2. Dejar enfriar.

Con la masa sobrante podéis aprovechar y hacer unas galletas.

1. Podéis hacerlas a la vez que la tarta y sacarlas del horno a los 10m…
2. …o podéis reservarla toda la noche en la nevera, o incluso congelarla (mejor con las formas de las galletas ya hechas, así las podéis meter directamente del congelador al horno).
3. Si la dejáis por la noche en la nevera, a la mañana siguiente sacadla y dejar 15m fuera para que se ablande un poco.
4. Estirarla con el rodillo, cortar las galletas.
5. Ponerlas en una bandeja de horno con papel de horno y hornear a 180ºC durante 10m.